Siempre soñé con ser mamá
Nunca soñé con el príncipe azul, siempre soñé con ser mamá! Y era mi deseo de cada cumpleaños! Y hoy puedo decir que soy muy feliz con mi bella Allegra! Mi guerrera, mi maestra! Mi mundo!
Nunca soñé con el príncipe azul, siempre soñé con ser mamá! Y era mi deseo de cada cumpleaños! Y hoy puedo decir que soy muy feliz con mi bella Allegra! Mi guerrera, mi maestra! Mi mundo!
Fuimos atendidos y asesorados por la Dra. Laura Ponte. Recibimos un trato más que personalizado, respetuoso y a disposición las 24 hs. Todo el equipo que rodea a la Dra. Ponte, fue de gran contención, teniendo en cuenta que para nosotros como pacientes, es un momento de gran vulnerabilidad, temor y sobre todo esperanza.
Tanta búsqueda, tanto imaginarlo, taaaaantos planes, y hoy lo tenemos acá! Hecho realidad!
Fue un camino largo con varios intentos fallidos y muchos sentimientos, ansiedad, esperanzas, frustración.
Gracias a nuestra constante lucha y al acompañamiento del equipo VITA, logramos ser padres de un hermoso bebé.
Fue un camino largo con varios intentos fallidos y muchos sentimientos, ansiedad, esperanzas, frustración. Pero pese a todos los obstáculos nunca bajamos los brazos y seguimos luchando con paciencia para poder cumplir nuestro sueño.
Gracias a nuestra constante lucha y al acompañamiento de la Dra. Ponte Laura y el equipo de la clínica VITA, logramos ser padres de un hermoso bebé que hoy está próximo a cumplir sus dos meses.
Durante toda la búsqueda de nuestro bebé pasamos por diferentes momentos, algunos un poquito más complejos que otros. Pero ninguno nos hizo retroceder, siempre gracias a la paciencia y atención recibida por parte de la Dra. Ponte Laura y todo su equipo.
Un placer haberlos encontrado en el momento justo de esta aventura.
Tanta búsqueda, tanto imaginarlo, taaaaantos planes, y hoy lo tenemos acá! Hecho realidad!
Realizamos con mi esposo un tratamiento alta complejidad (Fertilizacion in Vitro) en el Sanatorio Trelew a través de VITA.
Fuimos atendidos y asesorados por la Dra. Laura Ponte. Recibimos un trato más que personalizado, respetuoso y a disposición las 24hs del día.
Todo el equipo que rodea a la Dra. Ponte, desde la atención telefónica en Vita Madryn hasta el equipo del quirófano fue de un gran respeto y contención…teniendo en cuenta que para nosotros como pacientes, es un momento de gran vulnerabilidad, temor y sobre todo esperanza.
Nuestro resultado luego de dos intentos, fue positivo… Pero más allá del resultado (que es una inmensa felicidad), valoro que el camino transitado con ellos hizo que los momentos duros no lo fueran tanto.
En una frase diría que es un “sueño de amor hecho realidad”. Y para aquellas personas que están en nuestra misma situación, les diría que comenzar esta elección, de continuar formando una familia, no es un camino fácil. Pero gracias al apoyo humano por parte de todo el equipo de Vita, es posible seguir soñando.
Hay veces que los resultados no son los esperados, pero no por eso hay que bajar los brazos y hay que intentar nuevamente. Todo llega en su momento justo.
La llegada de nuestra hija nos cambió la vida y no hubiera sido eso posible sin el acompañamiento y la contención de nuestra médica.
Empecé con los tratamientos en otras instituciones. Hice muchos tratamientos de baja complejidad y dos de alta. Cuando llegué a Vita a ver a Laura venía bastante manoseada, un poco desesperada y bastante triste por los fracasos. Pero siempre con una nueva ilusión! Y con el deseo intacto y cada vez más potente de ser mamá!
Decidí ser mamá soltera y en la Dra. Ponte encontré mucha contención y acompañamiento! Los médicos de fertilidad no suelen ser muy empáticos! Pero con Laura me sentí muy cómoda! Aunque con su profesionalismo siempre mantiene la distancia óptima! Y eso también está bien!
Pasé nuevamente por un proceso de estudios necesarios para el comienzo del tratamiento. Tengo intacta en mi memoria las fechas en las que me realizó todos los procedimientos y lo diferente que fue la atención en la clínica, por ejemplo, de lo que había pasado en otras instituciones. Sentí que esas personas estaban para mí! Que no era una más! Si ustedes supieran los lugares por los que pasé! Pero bueno, no vale la pena recordarlos ya!
Laura me hizo la punción un 24 de agosto de 2017. Un anestesista muy amoroso estuvo en mi procedimiento y me sostuvo la mano mientras me dormía. De solo recordar ese momento se me llenan los ojos de lágrimas! Era el comienzo de mi maternidad y el final de una lucha tan intensa! Fueron días difíciles hasta la transferencia (que es cuando ponen a tu o tus hijos en tu útero). Laura me iba informando todo el tiempo de cómo iban creciendo mis hijitos!
Son momentos muy complejos y las pacientes de fertilidad somos muy muy intensas! Luchamos permanentemente con nuestros temores, nuestras frustraciones, nuestros fantasmas, en general nos morimos de ansiedad, y estamos con un nivel de estrés importante! Así que tener una médica que te sostenga pero que también por momentos te ponga un freno, es como debe ser.
Recuerdo el día de la transferencia que le pregunté a Laura porqué solo me quedó un blastocisto de los seis óvulos que habían fecundado. Le dije: Y si no funciona, cómo seguimos? Y ella me dijo: Vos estás pensando que no te vas a embarazar? Ese blastocisto llegó a la vida de mi útero un 29 de agosto 2017, día de la transferencia! El 8 de septiembre me hice el Beta. A las 17.10 hs me mandó un mail para decirme que la llame cuando pueda que tenía los resultados. Me temblaba todo el cuerpo! Pero creía que me iba a decir que era negativo! Le avisé a mi mamá y recuerdo que se vino a mi trabajo y me esperó en la puerta! La llamé con ella al lado, y Laura me dijo: Es re positivo, estás re embarazada! No puedo explicar con palabras lo que sentí! El amor inmenso que tenía guardado hacía años para mi bebé! Y todo lo que había imaginado se estaba haciendo realidad!
Nunca soñé con el príncipe azul, siempre soñé con ser mamá! Y era mi deseo de cada cumpleaños! Y hoy puedo decir que soy muy feliz con “Mi guerrera” como le digo yo! Luchó muchísimo para venir a este mundo!
Un 11 de mayo de 2018 nació mi bella Allegra! Mi guerrera, mi maestra! Mi mundo! Estoy eternamente agradecida con la Dra. Ponte y con su equipo de Vita, que siempre fueron tan cordiales! Y atentos! Con todo lo que necesité! Laura sabe que es mi ángel, yo se lo dije! Y gracias a la bióloga Dra. Marcela Herrera, que detrás de bambalinas hizo posible también que mi bebé estuviera en este plano! Y como si esto fuera poco Laura me recomendó a Melisa Martín, mi obstetra! Grosa total! Divina, dulce, hermosa por dentro y por fuera! También forma parte del equipo de Vita! Simplemente gracias!
Realizando mis controles de rutina en el año 2014, me diagnosticaron un quiste de ovario por el que me intervinieron quirúrgicamente. El diagnostico fue TUMOR DE BODERLINE (una forma de cáncer de ovario inicial) y me indicaron la ooforectomía (sacar todo el ovario).
Acepté operarme (luego de realizar una nueva interconsulta en Buenos Aires) con la esperanza de que esa fuera la solución definitiva, pero en febrero del 2016 me diagnosticaron un nuevo TUMOR DE BODERLINE en el otro ovario.
Los miedos fueron mucho mayores, mi fertilidad corría riesgo debido a que solo tenía un solo ovario y no tenía otra opción que volver a operarme.
Luego de la cirugía me informaron que quitaron solo un pedacito de ovario y habían dejado ¼ de ovario para que pueda congelar mis óvulos, no contaba con mucho tiempo debido a que podía volver a salir un nuevo tumor en cualquier momento.
Intente congelar mis óvulos en Buenos Aires pero no me dio resultado, no sirvió ningún ovulo. Obviamente mis miedos cada vez eran mayores, no me sentía para nada bien, me sentía inútil. Las ilusiones de algún día formar una familia se me habían venido abajo.
En marzo del año 2017 comencé a averiguar sobre algún médico que realizara el tratamiento de congelar óvulos pero en la zona ya que no quería volver a viajar. Para ese entonces había cambiado de ginecólogo y él me deriva con la Dra. Laura Ponte. Especialista en el tema.
Le comente mi situación a Laura, quien me realizó estudios y ecografías para estar seguras de que no haya ningún tumor y comenzamos con el tratamiento, que consistió en inyectar durante 15 días seguidos hormonas para ayudar a madurar los ovocitos, cada 3 días hacer una ecografía ginecológica para ver el crecimiento y controlar su tamaño, ya que cuando se obtiene el tamaño que se necesita se procede a realizar la punción.Ese día se interna al paciente ya que requiere ingreso al quirófano, colocan anestesia pero no muy intensa, solo es para no sentir ninguna molestia. La práctica tarda 40 minutos más o menos, luego la paciente queda internada hasta que se vaya el efecto de la anestesia. Al poco tiempo la doctora informa los resultados y se da el alta.
En mi caso logré obtener 6 ovocitos, dejamos pasar un tiempo para que el cuerpo se recupere, y luego se volvió a hacer una ecografía para ver cómo estaba el pedacito de ovario que tenía. Como estaba todo súper bien, Laura me propuso volver a congelar óvulos. Repetimos todo el proceso de nuevo y logré congelar 7 ovocitos más. Con ¼ de ovario se pudieron obtener 14 ovocitos!
Luego de haber realizado el tratamiento, en agosto del año 2017 me realicé controles de rutina como lo venía haciendo, y me vuelvo a encontrar nuevamente con un TUMOR DE BODERLINE. Volví a viajar a Buenos Aires y me quitaron el cuarto de ovario que quedaba.
Hoy sigo respetando los controles, cuido mucho mi útero, me recetaron unas pastillas anticonceptivas para que mi cuerpo obtenga la hormona que dejé de generar. Esta es la experiencia que me toco vivir, estoy feliz de haber dado con el centro Vita y con esta gran doctora que salvo mi fertilidad!
Nuestra experiencia con Vita fue muy grata, principalmente por el acompañamiento cálido y personalizado que realizó la Dra. Ponte desde el primer contacto que tuvimos con ella. Esa calidad en la atención, teniendo en cuenta que vivimos en otra ciudad; el trabajo artesanal respetando nuestra singularidad y la gran profesionalidad de todo el equipo, nos hicieron sentir contenidos y confiados en el camino que decidimos transitar.
Muchas gracias!
Las decisiones que tomamos no siempre son fáciles de llevar adelante, más aún cuando sé es una persona sola. Pero en esos casos la familia se vuelve un pilar fundamental, y si se tiene la suerte y el buen tino de encontrar un equipo médico y profesional como el de Vita, que fue y es para mí como mi familia de profesionales por todo el acompañamiento, la dedicación, la entrega, la calidez humana que constantemente he recibido, sumado a la excelencia profesional, puedo decir que tengo otro pilar importante.
Por todo esto, estoy sumamente agradecida de contar con ustedes en ésta etapa tan importante de mi vida!
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